Un año más, arranca el Festival
Internacional de Cinema Fantàstic de Sitges. No nos lo podíamos
perder, con lo que Óscar se ha plantado hoy allí única y
exclusivamente para ver The Age of Shadows, la última
película de Kim Jee-Woon, autor de thrillers de categoría
superior como I Saw the Devil o A
Tale of Two Sisters.
Ambientado en la época de la invasión japonesa de Corea durante
la primera mitad del siglo XX, The Age of Shadows es un
thriller explosivo de mecha lenta. Narra la historia de un comando de
rebeldes que pretende entrar explosivos en el país para cometer un
atentado y liberar a su país de la invasión del Japón imperial. El
desarrollo de la película es el punto fuerte de la misma, en un in
crescendo brutal que lleva a un último tramo de infarto.
Comentándolo con gente que estaba en la sesión y leyendo reseñas
de compañeros de otros blogs, a algunos les ha parecido demasiado
larga, pero personalmente me parece que no le sobra un solo minuto,
ya que precisamente ahí radica la magia de la cinta.
Con actuaciones que rozan la excelencia (Kang Ho-Song -
conocido por joyas como Sympathy for Mr. Vengeance, The
Host o Crónica de un Asesino en Serie – hace
un trabajo impecable que te atrapa y te arrastra hacia la pantalla) y
un apartado técnico inmejorable, con secuencias que algún día
estudiarán en las escuelas de cine, no sorprende que The Age
of Shadows vaya a representar a Corea del Sur en la próxima
edición de mis tocayos los Oscar.
El realizador surcoreano repite patrón, pero no por ello deja de
ser un film sorprendente, aunque en ocasiones el guion peque de
confuso en ciertos aspectos. Cruda, hermosamente violenta cuando es
necesario y con una maestría en su dirección que te deja embobado y
expectante.
Ya sabéis que no somos de poner puntuaciones, pero si tuviera
que hacerlo, The Age of Shadows es clarísimamente un
8,5. Y creo que estoy conteniéndome.
Mañana volveremos a por más, aunque por motivos personales de
nuevo será una sola sesión. Y esa es The Love Witch, de nuevo en el
Auditori (que, por cierto, de nuevo cumplen con creces en cuanto a
sonido… ¡Brutal!). No podíamos perdérnosla tras la entusiasta
recomendación de nuestro compañero Diego López de
Brigadoon.
No cambien de canal, mañana ma-ma-ma-másh.
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