viernes, 4 de noviembre de 2016

BAÑO DE SANGRE VOL.12: “CARNÍVOROS”

¡Qué pasó dominguers!

Ya se va acercando el festival de Molins y la emoción se va apoderando de nuestros seres. Reencuentros con coleguitas, cerveceo entre charlas cinéfagas, bocatas en la Barrina… todo para culminar en una maratón de 12 horas para salir de ahí con el culo-carpeta y los ojos de Bob Marley. Pero mientras tanto, seguimos devorando cine en casa para calmar el ansia.

Echaba ya de menos reseñar títulos más gamberros y desconocidos, y si hablamos de gamberrismo por estos lares, hablamos clarísimamente de Manolito Motosierra. Desde Alicante y con amor, Motosierra es un amante de lo enfermizo, tal y como ya demostró con su Jodidos Kabrones o dirigiendo la tercera entrega de la saga del recientemente desaparecido Ted Mikels: Corpse Grinders. Vamos, que le va la hemoglobina más que a un cura un culo virgen.


Jodidos Kabrones fue el preludio de lo que vendría después con Carnívoros: Fetos arrancados del vientre de su madre (“¡PUTA ITALIANA!”), paletos endogámicos que lo gozan con el sufrimiento ajeno tanto como comiendo mierda de la taza del WC, desmembramientos varios y pedrazos destroza-cráneos, entre otras muchas maravillas no aptas para mentes y estómagos sensibles. Y es que, de hecho, Carnívoros sigue explicando las tropelías de los Gutierrez (los paletos endogámicos de los que os hablaba), pero sin continuidad respecto a Jodidos Kabrones, puesto que en este caso cambiamos un albergue en algún lugar del Camino de Santiago y un pequeño reducto de los Gutierrez por un pueblo lleno de hijos de puta (la familia aumenta) a punto de celebrar el día de su patrón. Y, en medio de todo eso, llega al pueblo una horrible banda heavy llamada Las Pollas del Metal (grata sorpresa ver a mi amigo Pablo interpretando a Bull, el batería), que están de gira por la España rural y pinchan rueda cerca de ese pueblo que poco tiene que envidiar a Pleasent Valley (2000 Maníacos). Mientras los locales arreglan la fragoneta, la banda y su manager pasan la noche gracias a la generosidad y hospitalidad de los locales.


Al despertar, se toparán con un pueblo de putos tarados mentales que, uno a uno, los despedazará de las formas más horribles en un festival de casquería y situaciones escatológicas (antológica esa preparación del chocolate por parte del chef) de lo más divertidas. ¿Contároslas? No, mejor las descubrís por vosotros mismos. La edición española en DVD está totalmente descatalogada, pero podéis obtener a muy buen precio su versión inglesa bajo el título The Spanish Chainsaw Massacre, aunque en teoría tiene varios minutos menos de metraje, suponemos que porque habrán censurado partes, pero no os preocupéis porque aun así tenéis garantizada vuestra dosis de casquería y sangre a cascoporro. Según tengo entendido, habrá una edición americana con Jodidos Kabrones y Carnívoros que esperamos que sea zona libre y en versión íntegra. Estaremos al loro de ello.

Como curiosidad, os dejamos con un recorte de un diario alicantino en el que se refleja la censura sufrida en Alemania, donde está prohibida la emisión, venta y distribución de Carnívoros. Parece que la Merkel no conoce a Buttgereit, Ittenbach y otros tantos compatriotas suyos, ni ese subgénero conocido como ultragore alemán. De sinsentidos está el mundo lleno.


Recordad una de las lecciones vitales que nos da esta maravilla de película: acudid siempre a un profesional a haceros la manicura, aunque duela. La mejor forma, sobre todo si sois darks, es arrancar las uñas y dejarlas crecer. Os ahorrareis el esmalte negro.

HAIL SEITAN!
  
Óscar Lladó

No hay comentarios:

Publicar un comentario