Se han rodado una infinidad de películas sobre la vida de
Jesús y la Biblia pero pocas hay que no divaguen en los aspectos más morbosos
(véase La Pasión de Cristo) o no estén sesgadas en demasía por una ideología conservadora.
Sin ir más lejos el Vaticano no ha tenido más remedio que declarar El Evangelio
Según Mateo la mejor adaptación de la
vida de Cristo a pesar de que Pier Paolo Pasolini fuese abiertamente comunista,
ateo y homosexual. Y ejecutado por ello, para más INRI [sic].
El Evangelio Según Mateo relata la vida de Jesús desde el
anuncio de su nacimiento hasta su resurrección tres días después de su muerte,
pasando por pasajes como su bautismo por Juan Bautista o varios relatos de sus discípulos. Todo narrado con una gran fidelidad al texto original.
Jesucristo, interpretado Enrique Irazoqui, es presentado
casi como un revolucionario bastante distinto de la figura de mártir
misericordioso que se suele mostrar. La película, rodada en blanco y negro, es
realista y sencilla. Priman los planos y estética simples, el ritmo pausado y la
naturalidad con la que se tratan los hechos. Es una película que no aspira a florituras y muestra un cristo más humano, más verdadero, más voraz y mucho menos idealizado (solo hace falta ver que físicamente es todo lo opuesto a la imagen icónica de Cristo).
La Biblia ha sido ámpliamente criticada por la gente que la asocia directamente a la Iglesia pero lo cierto es que se trata de una de las obras literarias de mayor calidad e importancia que se han escrito jamás, independientemente de si se toma como ficción o hechos reales. Está claro que Pasolini supo aprovecharlo muy bien para otorgarle su visión más humanista.
Margot
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