¡Dominguers! Aquellas personas
que seguís nuestras andaduras festivaleras sabréis que el año
pasado quedamos encantados y enamorados de la que consideramos ya una
de las citas ineludibles del verano: el Fantosfreak. Porque, si hay
un festival que sea puro verano sin cortar, ese es sin duda el que
reúne a más de 1.500 almas cada noche en el Parc del Turonet de
Cerdanyola para ver un total de 44 trabajos más variados que un
surtido Cuétara. Y no, no se me ha ido el dedo: 1.500 espectadores
de media… ¡Cada noche! Unas cifras envidiables que, sin duda,
recompensan el duro trabajo que su staff lleva realizando durante la
friolera de 19 años. Casi nada, oigan.
Durante todos estos años han
pasado por el festival cortometrajes finalistas a los Oscar,
ganadores de los Goya, de Sundance… y una enorme cantidad de
trabajos exclusivos que solo se han visto en su gigantesca pantalla.
Sin duda, una apuesta que ha conseguido crear su propia identidad (ya
son míticos sus personajes introductorios de los cortometrajes, como
Garci Superstar, Pepito o Spoiler Man), en la que también tienen
cabida otras artes como la música (cada noche, previamente a la
proyección de cortometrajes, tienen lugar conciertos de los más
diversos géneros) y que sigue apostando por combinar trabajos
profesionales con otros realizados con menos medios (¡o con
ninguno!), proporcionando un impagable escaparate a creadores de todo
tipo.
A todo ello sumamos lo positivo de
su ubicación, en un parque del centro de Cerdanyola, fácilmente
accesible en coche, tren o bus. Allí se junta (insistimos, ¡1.500
personas por noche!) gente de todo tipo. Es fácil ver familias al
completo u octogenarios a los que es impagable mirar para ver sus
reacciones ante algunos de los cortos (pero que, como dijimos el año
pasado, no ves que se vayan escandalizados, si no que disfrutan con
el ambiente). Y es que lo grande del Fantosfreak es ver cómo
acercan los trabajos de género a un público que puede no ser el
habitual. En eso no tienen rival.
Por todo esto y mucho más, no
podéis perderos esta decimonovena edición en que podremos disfrutar
de trabajos multipremiados (Caronte de Luís Tinoco,
RIP de Albert Pintó y Caye Casas, 9
Pasos de Marisa Crespo y Moisés Romera, The
APP de Julián Merino, We Summoned a Demon de
Chris McInroy o DaemonRunner de Kiah Roache-Turner),
de sorpresas que creo que prácticamente nadie habría imaginado
(¿Ken Stringfellow, de R.E.M. y de The Posies
tocando en el festival?) y de las múltiples joyas en forma de
premieres, interludios, cortinillas y spots con los personajes
clásicos (“¡Ay este Pepitoooooooooooo!”) que nos alegran
estas calurosas noches de Julio.
¡HASTA AHORA!
Óscar Lladó
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